Al final de su vida, el filosofo Arthur Schopenhauer alcanzo el reconocimiento publico de su obra que durante tanto tiempo se le habia negado. Una joven y prometedora artista, Elisabeth Ney, solicito permiso para hacerle un busto. Halagado, el gran pesimista accedio a esta peticion. Durante varios meses poso para la joven y entre tanto converso con ella de todo lo imaginable. Entre el viejo pensador celebre por su misoginia y la bella artista se trabo una relacion extranamente dulce. En algunos momentos, Schopenhauer parecio revisar su opinion sobre el genero femenino... En esta comedia filosofica, elocuente y sutil, se imagina una de aquellas sesiones entre la escultora y su ilustre modelo. El filosofo exhibe sus ideas ante una oyente tan atenta como ocasionalmente ironica. Se repasa el destino del hombre, orgulloso de sus certezas y martirizado por sus perplejidades. Mientras, la supersticion ronda, llega un forastero atrevido, se prepara una invocacion a los espiritus, y la carne dicta urgencias que se burlan de los alambicados sistemas intelectuales. / At the end of his life, the philosopher Arthur Schopenhauer achieved the public recognition for his work that went unnoticed for so long. A young a promising artist, Elisabeth Ney, asks for his permission to make a sculpture of him. Flattered, the great pessimist accepts her request. Over the course of a few months he poses for the young girl, and meanwhile he speaks to her about everything and anything imaginable. Between this thinker famous for his misogynistic ideas and this beautiful artist a strangely sweet relationship is formed. At times, Schopenhauer even seemed to revise his opinion on the female gender In this eloquent and subtle philosophical comedy, one of these sessions between the sculptor and her famous model is imagined.